"Lo que vas a hacer, hazlo pronto!"
Esa fue la penúltima frase de Jesús a Judas antes de ser apresado, golpeado y crucificado, "Lo que vas a hacer, hazlo pronto". Estas pudieran ser las palabras que detonaron su remordimiento de haber vendido al maestro: y las que posteriormente lo llevarían al suicidio; por no acercarse a la misericordia de Dios. En las escenas de estas palabras, Jesús dijo algo que nos muestra bajo que prerrogativa de conocimiento actuó Cristo en la situación de su arresto. El dijo: ¿Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos me tratais? Habiendo estado con vosotros cada día en el templo, no extendisteis las manos contra mí; mas esta es vuestra hora, y la potestad de la tinieblas. Lo cual viene a confirmar las palabras del sabio Salomón en Eclesiastés 3: todo tiene su tiempo. los momentos de prueba comunes a todos los cristianos se dan como testimonio de que bajo circunstancias de elección nosotros escogemos la respuesta correcta. Cuando a Job le llegó la hora de las tinieblas,...